Un festivo Día de la Madre
Por Guillermo Mejía
Soy desnanado le comenté a la periodista Patricia Rivera, de la Radio Mayavisión, también alumna de Periodismo de la Universidad Nacional y quien me ha confiado ser su asesor de tesina. Ni modo, cuando a la madrecita de uno ya no se encuentra en lo terrenal, pues, siempre perdurará en el corazón. Qué dicha para vos que tenés la fortuna de contar con ella.
La realidad es que el 10 de mayo, no lo tomo con tristeza ni desconsuelo, sino con alegría. Cuando escribo esto muy al contrario, se me viene a la mente el carácter de mi mamá y el legado que nos dejó a sus hijos, y a mi papá. Una mujer luchadora, solidaria, buena gente, aunque verguiadora porque agarró en serio su tarea educativa. Se lo agradezco, aunque no compartía las pijiadas que nos daba.
Junto a la mano de ella conocí el mar, lugar donde vivió su niñez, conocí las historias sacrificadas de la familia, sus papás y hermanos, conocí la música tropical, las bandas del swing, los quintetos de jazz, en fin. Tuve plena conciencia de que existía otra costa, en el caribe centroamericano, donde la familia puso la huella.
Los bellos recuerdos toman vida. El pretexto del Día de la Madre cobra fuerza. Hasta ahora, nunca he sentido más dolor en ese día de la madre ausente. Ya todo se volvió natural como cuando aparece en mis sueños agitados y aún me aconseja que me porte bien, que no sea echo leña con los demás, que siempre estará vigilante. Esos sueños preceden los días más hermosos de la vida.
Así que hermanos, amigos, familia disfruten la ocasión. Extraño a mi madrecita, porqué no decirlo. Sin embargo, como le comenté a la colega Patricia Rivera, no seamos egoístas, por allá está esperándome cuando llegue el final de mi vida. Con gusto espero mi reencuentro con el ser que me dio la vida, me enseñó tantas cosas, así como querer a la humanidad.
Para no cansarles me permito recordar parte de la letra de la canción que Lito Nebbia, el cantautor argentino de los famosos Gatos, dedicó a su madre, el adorable tormento.
“Madre, escúchame, quiero decirte algo que quizás jamás comprenderás… quiero andar rodando y rodando, sin volver quién sabe hasta cuándo, pero madre de ti me acordaré”.
“Madre, escúchame, en cualquier momento tú sabes que a tus brazos volveré… ya no importa ni cómo ni cuándo, si al lugar que yo vaya rodando, madre de ti me acordaré”.
“Ella me miró y me dijo así: hijo eres igual que los olas me besas y te vas…”
Reciban, entonces, un cordial saludo en esta fecha especial, denles de mi parte un fuerte abrazo a sus madrecitas y claro mis felicitaciones a las que ya son madres, y, por supuesto, a las madres postreras donde descansa el futuro de nuestra sociedad. Y también hagan espacio para disfrutar de la vida más si tienen a la par a una mamá que ahora yo guardo en el corazón.
Para que disfruten, estas también le gustaban a mi mamá:
http://www.youtube.com/watch?v=v7aQylt4NrA (Amor y control, Rubén Blades)
http://www.youtube.com/watch?v=Czv5MyxiumQ (Todo me gusta de ti, Alberto Beltrán)
http://www.youtube.com/watch?v=rXB33yd4KI0 (Aquellos ojos verdes, Nath “King” Cole)
2 comentarios:
Patrañas las de esos que dicen que el día de la madre solo es una fecha comercial en la cual no hay que darle nada a la mamá para disque no darle gusto a los comerciantes, por favor hay que intentar ser felices y disfrutar a mama mientras viva.
Como bien dice usted, no hay que se egoístas. Lo que una madre nos da nadie mas en la tierra lo podrá dar.
Cierto, día de las madres deben ser todos para demostrarle el aprecio y respeto que la vida nos exige por el hecho de habernos traído al mundo, solo eso basta para amarla.
Parir y sufrir no es un acto de hombres, es un acto que necesita mucho mas que hombría, se requieren unos ovarios bien puestos.
Totalmente de acuerdo con su postura. Gracias por sus comentarios, cordiales saludos.
Publicar un comentario